En el año 2024 se produjo el mayor desastre ambiental en Bolivia debido a los incendios forestales que arrasaron con más de 10 millones de hectáreas. Lo acontecido no fue un evento aislado, sucedió paralelamente a incendios en Brasil, Perú, Colombia, Ecuador, Argentina y Paraguay.
Muchos factores están detrás de los incendios, intereses variados que están a favor de que áreas boscosas sean arrasadas a un ritmo cada vez más acelerado. Valga de ejemplo el punto crítico al que estamos llegando con la deforestación de la Amazonía, que ya ha perdido más del 10% del bosque original y si pierde el 25% se coloca en un punto de no retorno.
Si bien hay una marcada preocupación global por la temática ambiental y las graves consecuencias que podemos enfrentar si no se toman medidas a nivel de estados para cuidar y preservar el medio ambiente, en los hechos las acciones que se están implementando no son suficientes para contrastar el nivel de devastación que la acción humana está ocasionando en la naturaleza.
Problemas así de grandes apelan al concurso de cada uno de los habitantes del planeta. No es realista pretender que las soluciones lleguen desde afuera o desde arriba frente a dificultades que tienen que ver también con nuestra acción individual, con la forma en que nos relacionamos con los otros seres que habitan este planeta.
Una respuesta frente a estas preocupaciones ha nacido en el ámbito de jóvenes estudiantes en Bolivia.
El grupo Voluntariado Sembradores de Vida nació 4 años atrás desde la inspiración de 30 universitarios que se propusieron realizar una actividad de forestación en la zona de Cota en la ciudad de La Paz.
Los buenos resultados de esa actividad los motivó a considerar replicarla en otras comunidades y municipios, de esa forma, empezaron a involucrar a diferentes jóvenes de otras carreras en otras universidades, principalmente públicas.
Sembradores de vida Bolivia es un voluntariado ambiental juvenil que promueve la conservación y la restauración del medio ambiente. Realiza actividades de forestación, reciclaje, educación ambiental y recuperación de áreas verdes generando un cambio sostenible en Bolivia.
Actualmente, cuentan con un equipo de 244 voluntarios y están presentes en 4 de los 9 departamentos de Bolivia: Cochabamba, La Paz, Santa Cruz y Oruro
Ellos buscan promover la conciencia ambiental entre los jóvenes para fomentar un impacto positivo en la sociedad a través de 3 pilares:
- Acción ambiental: contribuir a la conservación y protección del medio ambiente en Bolivia a través de proyectos como ser forestación, limpieza y recuperación de áreas verdes
- Sensibilización a la sociedad sobre la importancia de cuidar el medio ambiente. A través de capacitaciones virtuales y presenciales dirigidas a unidades educativas, encuentros juveniles, público en general donde se comparte la necesidad de hacer un cambio positivo, haciendo énfasis en que cada acción pequeña cuenta y vale. Se da énfasis en 4 elementos claves en el cuidado ambiental: agua, energía, reciclaje y la forestación o cuidado de áreas protegidas
- Formación y capacitación: buscan desarrollar habilidades y conocimientos sobre la conservación y protección del medio ambiente en los voluntarios, así como habilidades relacionadas con su vida personal y profesional, como ser: capacitación en manejo de equipos, resolución de conflictos, elaboración, planificación y ejecución de proyectos
En cada departamento los grupos se organizan en equipos y cada equipo elabora proyectos ambientalistas que son presentados a diferentes instancias en el territorio como ser, instituciones públicas, comunidades, juntas de vecinos, involucrando de ese modo el compromiso de esos actores para garantizar la implementación y la sostenibilidad de las acciones.
A pesar de la relevancia de los proyectos que se proponen, la principal dificultad que han encontrado es la falta de financiamiento para implementar los proyectos. No han logrado en la mayoría de los casos contar con apoyo público, y muchas veces han tropezado con la burocracia de esas instancias.
Esas circunstancias no han impedido su trabajo. Al final, son los mismos voluntarios quienes financian los proyectos, porque para ellos la premisa que define el trabajo es apuntar al cambio. El cambio que persiguen es formar en el amor a Bolivia, a la sociedad y el medio ambiente por medio de las acciones altruistas, ayudar a los demás sin esperar algo a cambio.
A lo largo de este tiempo han implementado más de 70 proyectos. Una de las acciones más destacada ha sido la limpieza del rio Katari, afluente del Lago Titicaca. Han participado de la actividad más de150 voluntarios. Ha sido relevante para los participantes no solo por la satisfacción al ser parte de la actividad, sino por el nivel de sensibilización alcanzado: ha sido muy ilustrativo ver cómo la basura que se genera en las ciudades y no es tratada adecuadamente termina contaminando afluentes y generando un grave problema ambiental en comunidades aledañas que consumen el agua y la utilizan para el cultivo o para criar ganado.
La motivación y el compromiso de seguir trabajando lleva a que Voluntariado Sembradores de Vida se haya propuesto tener presencia en todos los departamentos de Bolivia y se pueda tener mayor alcance y colaboración con instancias públicas locales y nacionales.
Frente a un panorama ambiental que muchas veces puede parecer altamente desalentador, el mensaje que Voluntariado Sembradores de Vida quiere dejar es invitar a todos los jóvenes de diferentes ciudades de Bolivia y de diferentes países en América Latina, a ser parte del cambio que queremos ver en el mundo. ¡Las pequeñas acciones pueden generar grandes cambios!
A lo largo de nuestra historia humana, cuando pensamos en esos acontecimientos que nos han marcado positivamente seguro que resuena la frase: “Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”. Queda a cada uno decidir si se une a la suma de esos esfuerzos.
El Día de las Buenas Acciones es un día global de hacer el bien y es el pináculo de esta iniciativa anual de buenas acciones. Creado por la empresaria y filántropa Shari Arison en el año 2007, el Día de las Buenas Acciones ha ido creciendo y actualmente se encuentra presente en 115 países y cuenta con millones de participantes. Este año será el domingo 6 de abril.